Compartiendo Sus Tesoros

por Darla Noble

Deuteronomio 8:18

Antes acuérdate de Jehová tu Dios: porque él te da el poder para hacer las riquezas, á fin de confirmar su pacto que juró á tus padres, como en este día.

Pete, un hombre tranquilo y sencillo, disfrutaba especialmente de la jardinería.

Cuando Pete tenía dieciséis años, ya había descubierto cómo injertar árboles frutales para crear un tipo de manzana completamente diferente. ¡Nada mal para un niño que solo había cursado octavo grado y trabajaba solo!

A lo largo de su vida, la gente felicitó a Pete y a su esposa por los productos que cultivaban en su jardín, los parterres o camas de flores esparcidos por el césped delantero de su granja y el pequeño huerto lleno de los árboles únicos de Pete.

Siendo el hombre humilde y algo tímido que era, Pete siempre agradecía las amables palabras. Pero su agradecimiento siempre iba seguido de la afirmación: “Es simplemente un regalo del Buen Dios: su forma de compartir sus tesoros conmigo”.

Todo lo que hay en la tierra pertenece al Señor. Él es el amo y gobernante del universo. Pero debido a su tremendo amor por nosotros, Él comparte sus tesoros, extendiéndonos el privilegio y el honor de cuidarlos y disfrutar de los placeres que pueden brindarnos.

Se un buen prestatario. Cuida las cosas que Dios confía en que administres para Él para que puedas recibir las bendiciones que Él quiere darte por un trabajo bien hecho.


Reflexión

¿Qué me ha prestado Dios que no le estoy compartiendo? ¿Qué haré para cambiar eso?


Plegaria

Señor celestial, gracias por las bendiciones materiales que me brindas todos los días. Por favor ayúdame a recordar que estas cosas son tuyas. Ayúdame a honrarte en la forma en que las cuido. En el nombre de Jesús oro, Amén.