por Pastor Ken
Así que, ofrezcamos por medio de él á Dios siempre sacrificio de alabanza, es á saber, fruto de labios que confiesen á su nombre.
Hay poder en la música. La música puede sanar, inspirar, consolar.
Mi esposa estaba enferma de malaria. Las posibilidades de su recuperación eran escasas o nulas. El médico recomendó llamar a todos nuestros amigos y familiares porque no veía ninguna esperanza.
Cerca de la medianoche, regresaba solo a casa, llorando. No sabía qué hacer.
Luego, una canción desde mi iPhone sonó por las bocinas del auto. El sonoro y profundo sonido de las notas tocaron mi corazón porque la letra tenía un mensaje claro: Cualquiera que esté en problemas debe mirar a Jesús.
Eso era exactamente lo que necesitaba. Puse el canto una y otra vez. Me confortó y me dio esperanza.
Por la gracia de Dios, mi esposa mejoró. Unos dos años después, se curó por completo. Ahora ella está saludable.
Si tienes una carga que no puedes llevar, si sientes que no hay a dónde acudir en busca de esperanza, recuerda que Jesús está esperando que vengas a Él.
En tu desesperación, entona algunos cantos edificantes o escucha algunos himnos y tu apagado ánimo volverá a brillar. Un canto espiritual como una oración levantará tu corazón, dará calidez a tu alma y dará una esperanza viva para tu futuro.
Que Dios te de paz y consuelo como lo hizo conmigo en el momento más oscuro.
¿Cómo puedo usar la música para superar la tristeza y el desánimo?
Querido Señor, gracias por tu toque sanador a través de la música. Permíteme cantar constantemente y encontrar paz y esperanza en ti. Oro en el nombre de Jesús, Amén.