Haciéndose Amigo De Dios A Través De La Oración

por Beatrice Jean-Baptiste

Éxodo 33:11

Y hablaba Jehová á Moisés cara á cara, como habla cualquiera á su compañero. Y volvíase al campo; mas el joven Josué, su criado, hijo de Nun, nunca se apartaba de en medio del tabernáculo.

Imagina que te invitan a una cena y, al llegar, te das cuenta de que es una fiesta sorpresa con todos tus amigos más cercanos. ¿Cómo te sentirías?

Lo más probable es que, después del shock inicial, disfrutes con gusto de la compañía de tus seres queridos y saborees cada momento.

Las relaciones saludables con nuestros seres queridos nos dan una idea de cómo interactuar con Dios. A veces nos olvidamos simplemente de hacernos amigos de Él. Moisés consideraba a Dios su amigo más querido. Se tomó el tiempo para adorar a Dios y conocerlo a un nivel íntimo. El mismo acceso que Moisés tuvo a Dios está disponible para ti y para mí.

La oración nos da acceso a Dios. Muchas veces complicamos demasiado la oración. La oración es simplemente un medio para hacerse amigo de Dios a través de la conversación. Pregúntale a cualquier grupo de amigos y pronto te darás cuenta de que la comunicación es clave para la intimidad. Dios no es diferente. A medida que nos acercamos a Él, Él se acerca a nosotros (Santiago 4:8).

En la oración, permítete ser transparente y abierto a Dios. Comparte con Él todas tus preocupaciones, miedos, alegrías y triunfos. De la misma manera que compartirías tu corazón con un amigo durante una comida, expresa tus anhelos más profundos a Dios. A medida que comiences a compartir más de ti con Él, tu amistad con Dios crecerá.


Reflexión

¿Cómo hablo con mis amigos? ¿Cómo hablo con Dios? ¿Cómo es mi vida de oración? ¿Cómo puedo utilizar la oración para acercarme a Dios?


Plegaria

Señor celestial, ayúdame a ser amigo de Ti y a enamorarme más de Ti cada día. Por favor muéstrame la manera de acercarme cada vez más a ti. En el nombre de Jesús oro, Amén.