Virtud no es una palabra que oímos a menudo, pero eso no significa que no seamos conscientes de ella en nuestra vida diaria. Una virtud es un atributo positivo que mejora algo o a alguien. Jesús mismo, se nos dice, demostró muchas virtudes a medida que crecía de niño a adulto: “Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y los hombres” (Lucas 2:52 WEB).
La palabra “virtud” o “virtuoso” rara vez se encuentra en la Biblia, pero el concepto de desarrollar intencionalmente rasgos y hábitos positivos para glorificar a Dios impregna toda la Escritura.
La virtud proviene de llenar intencionalmente nuestra mente con cosas buenas
Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en esto pensad.
La virtud está asociada con la dignidad y es grandemente valorada
Mujer fuerte, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepuja largamente á la de piedras preciosas. El corazón de su marido está en ella confiado, Y no tendrá necesidad de despojo.
Jesús fue el modelo de la virtud; él es nuestro ejemplo
Gracia y paz os sea multiplicada en el conocimiento de Dios, y de nuestro Señor Jesús. Como todas las cosas que pertenecen á la vida y á la piedad nos sean dadas de su divina potencia, por el conocimiento de aquel que nos ha llamado por su gloria y virtud: Por las cuales nos son dadas preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas fueseis hechos participantes de la naturaleza divina, habiendo huído de la corrupción que está en el mundo por concupiscencia.
Una persona virtuosa que honra a Dios es una bendición para toda su familia
Levantáronse sus hijos, y llamáronla bienaventurada; Y su marido también la alabó. Muchas mujeres hicieron el bien; Mas tú las sobrepujaste á todas. Engañosa es la gracia, y vana la hermosura: La mujer que teme á Jehová, ésa será alabada.
La virtud es poderosa
Y luego Jesús, conociendo en sí mismo la virtud que había salido de él, volviéndose á la compañía, dijo: ¿Quién ha tocado mis vestidos?
Si mis amigos y con los que me acompaño no son virtuosos, me arruinarán
No erréis: las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres. Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen á Dios: para vergüenza vuestra hablo.
La gente está desesperada por experimentar la sanidad que ofrecen los virtuosos
Y toda la gente procuraba tocarle; porque salía de él virtud, y sanaba á todos.
La virtud no se oculta; todos la reconocen cuando la ven
Ahora pues, no temas, hija mía: yo haré contigo lo que tú dijeres, pues que toda la puerta de mi pueblo sabe que eres mujer virtuosa.
La fe proporciona la virtud de una persona, que conduce a muchas cosas deseables
Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, mostrad en vuestra fe virtud, y en la virtud ciencia; Y en la ciencia templanza, y en la templanza paciencia, y en la paciencia temor de Dios; Y en el temor de Dios, amor fraternal, y en el amor fraternal caridad.
El Señor bendice la virtud con fuerza y valor
Entonces uno de los criados respondió, diciendo: He aquí yo he visto á un hijo de Isaí de Beth-lehem, que sabe tocar, y es valiente y vigoroso, y hombre de guerra, prudente en sus palabras, y hermoso, y Jehová es con él.