por Darla Noble
Por lo cual, asimismo oramos siempre por vosotros, que nuestro Dios os tenga por dignos de su vocación, e hincha de bondad todo buen intento, y toda obra de fe con potencia, Para que el nombre, de nuestro Señor Jesucristo sea glorificado en vosotros, y vosotros en él, por la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesucristo.
Un soldado es entrenado antes de ser enviado a defender su país. Un médico soporta años de intenso estudio y entrenamiento antes de ser declarado médico. La educación de un maestro abarca una amplia gama de materias para que, a su vez, estén equipados para educar las mentes jóvenes.
Dios es el maestro permanente del cristiano.
Su permanente provisión de talentos, habilidades y el poder del Espíritu Santo te equipan para hacer las grandes obras que Él te asignó. Todo lo que tienes que hacer es agradecer a Dios y decir: “¡Sí, señor!” Luego muévete con fe para realizar su mandato.
Dios nos ha bendecido con pasiones y habilidades para que podamos, a su vez, bendecir a otros. Algunas formas en que podemos permitir que la gracia de Dios sea visible a través de nosotros son:
- Compartir tus talentos para alegrar la vida de los necesitados.
- Usar un pasatiempo como un modo de ministrar a otros.
- Dejar que la Buenas Nuevas de Jesús te llenen de alegría, haciendo que Jesús sea atractivo para todas las personas con las que entres en contacto.
- Vivir para que otros vean al Salvador en ti y lo amen también.
¿Qué puedo hacer esta semana para servir a los demás y traer gloria a Dios? Escribiré algo que hoy puedo hacer.
Querido Dios, muéstrame cómo quieres que use lo que soy para hacer brillar tu amor y tu gracia. Quiero que mis obras te glorifiquen. Por favor, nunca dejes de enseñarme. En el dulce nombre de Jesús oro, Amén.