Versículos de la Biblia sobre
Relaciones

Desde el principio, las relaciones con los demás han sido el núcleo de la humanidad. Fuimos creados a imagen de Dios (Génesis 1:26). Dios reconoció en los albores de la creación que, incluso si se está rodeado de una prístina perfección, no es bueno que una persona esté sola (Génesis 2:18).

Dado que necesitamos comunión con Dios y con los demás, debemos cultivar intencionalmente relaciones que nos edifiquen en lugar de destruirnos, porque todos somos hijos de Dios y estamos formando relaciones aquí que Dios quiere que duren por la eternidad.

La empatía, el respeto y la humildad son las características de las buenas relaciones

Romanos 12:15-17

Gozaos con los que se gozan: llorad con los que lloran. Unánimes entre vosotros: no altivos, mas acomodándoos á los humildes. No seáis sabios en vuestra opinión. No paguéis á nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres.

Todo hijo de Dios es miembro de su familia

Mateo 12:46-50

Y estando él aún hablando á las gentes, he aquí su madre y sus hermanos estaban fuera, que le querían hablar. Y le dijo uno: He aquí tu madre y tus hermanos están fuera, que te quieren hablar. Y respondiendo él al que le decía esto, dijo: ¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos? Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hiciere la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ese es mi hermano, y hermana, y madre.

Las relaciones familiares se basan en el respeto mutuo

Éxodo 18:7

Y Moisés salió á recibir á su suegro, é inclinóse, y besólo: y preguntáronse el uno al otro cómo estaban, y vinieron á la tienda.

Nunca debo valorar mis relaciones terrenales por encima de mi relación con Dios

Lucas 14:26

Si alguno viene á mí, y no aborrece á su padre, y madre, y mujer, é hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su vida, no puede ser mi discípulo.

Mi relación con Dios es como una amistad

Job 29:2-5

Quién me tornase como en los meses pasados, Como en los días que Dios me guardaba, Cuando hacía resplandecer su candela sobre mi cabeza, A la luz de la cual yo caminaba en la oscuridad; Como fué en los días de mi mocedad, Cuando el secreto de Dios estaba en mi tienda; Cuando aún el Omnipotente estaba conmigo, Y mis hijos alrededor de mi;

Mi relación con Dios reemplaza a todas las demás relaciones

Marcos 10:29-30

Y respondiendo Jesús, dijo: De cierto os digo, que no hay ninguno que haya dejado casa, ó hermanos, ó hermanas, ó padre, ó madre, ó mujer, ó hijos, ó heredades, por causa de mí y del evangelio, Que no reciba cien tantos ahora en este tiempo, casas, y hermanos, y hermanas, y madres, é hijos, y heredades, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna.

Debo elegir a mis amigos sabiamente

Proverbios 12:26

El justo hace ventaja á su prójimo: Mas el camino de los impíos les hace errar.

Los hijos de Dios no siempre se llevan bien; a veces la separación es necesaria

Hechos 15:39-40

Y hubo tal contención entre ellos, que se apartaron el uno del otro; y Bernabé tomando á Marcos, navegó á Cipro. Y Pablo escogiendo á Silas, partió encomendado de los hermanos á la gracia del Señor.

Debo protegerme de las relaciones destructivas

Proverbios 22:24-25

No te entrometas con el iracundo, Ni te acompañes con el hombre de enojos; Porque no aprendas sus maneras, Y tomes lazo para tu alma.

Debo esforzarme en mantener y apoyar mis relaciones terrenales

1 Corintios 14:26

¿Qué hay pues, hermanos? Cuando os juntáis, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación: hagáse todo para edificación.

Debería modelar mi relación con los demás en la relación de Cristo conmigo

Efesios 4:32

Antes sed los unos con los otros benignos, misericordiosos, perdónandoos los unos á los otros, como también Dios os perdonó en Cristo.