Dios Con Nosotros

por Heather Tietz

Éxodo 13:21-22

Y Jehová iba delante de ellos de día en una columna de nube, para guiarlos por el camino; y de noche en una columna de fuego para alumbrarles; á fin de que anduviesen de día y de noche. Nunca se partió de delante del pueblo la columna de nube de día, ni de noche la columna de fuego.

Cuando los hijos de Israel se marcharon de Egipto, Dios estaba con ellos.

Como Dios es espíritu, se manifestó en cosas visibles, como una nube y una columna de fuego, para que la gente viera que verdaderamente Él estaba allí con ellos. Cuando temían que iban a morir por falta de alimentos, cuando recogieron su oro para construir un dios-becerro al que adorar, cuando temblaron de miedo por los relatos de gigantes que moraban en la Tierra Prometida, la nube o el fuego de Dios estuvieron allí.

La presencia de Dios fue visible cada vez que se lamentaron y quejaron. A pesar de sus sentimientos, Dios nunca se fue. A pesar de su ceguera, Él permaneció frente a ellos.

Más tarde en Israel, Dios se manifestó de una manera más tangible. Vino como Jesús, Emanuel, “Dios con nosotros”.

No era simplemente visible a la distancia, sino que caminaba, hablaba y comía a nuestro lado. Sin embargo, sus amigos más cercanos aún temían, se quejaban, discutían y pecaban frente a Él.

Aunque han pasado 2000 años desde que Jesús caminó sobre la tierra, para aquellos que lo aman, Él está más cerca que nunca como un Consejero, susurrando a nuestras conciencias, consolándonos en nuestra tristeza, reemplazando el temor por la paz, incitando a la alabanza, recordándonos agradecer, dando sabiduría, ayudándonos a amar. La próxima vez que tropieces, recuerda que Dios está con nosotros. Dios está contigo.


Reflexión

¿Cuándo fue un momento en el que estuve agudamente consciente de que Dios guiaba mi vida? ¿Cómo respondí a su dirección?


Plegaria

Amado Dios, por favor lléname con tu Espíritu. Que nunca olvide que tú siempre estás conmigo. Te quiero. En el nombre de Jesús oro, Amén.