Toma un momento y considera la lista de las obras de Jesús en la tierra.

Incluye cosas tales como: sanar a los enfermos, convertir el agua en vino, alimentar al hambriento, caminar sobre el agua y resucitar a los muertos.

Sin embargo, en el versículo de hoy, Jesús dijo que si creíamos en Él, también podríamos hacer tales obras. Todo lo que pidiéramos en su Nombre, Él lo haría, para que Dios fuera glorificado a través de la vida de Jesús aquí en la tierra (Juan 14:13-14).

Todo el que cree en Jesús está dotado de dones del Espíritu Santo (1 Corintios 14:11). Sin embargo, muchos creyentes viven muy por debajo de su potencial cuando se trata de usar sus dones espirituales.

¿Estás dejando que los dones que Dios te ha dado permanezcan ociosos, o le estás pidiendo que te muestre cómo alcanzar tu máximo potencial en la vida, alcanzando a los demás, en tus relaciones, tus finanzas y tu carrera?

Las bendiciones de Dios son interminables para aquellos que ponen su fe en Él, para aquellos que viven en obediencia a Él.

Las bendiciones del pasado son maravillosas, pero lo mejor está por venir si te mantienes fiel. Así que sigue aguardando, orando y usando tus talentos y dones para compartir la Buena Nueva y vivir las aventuras que Dios tiene planeadas para ti.