Lo Que Dios Considera Mejor

por Heather Tietz

Isaías 46:9-10

Acordaos de las cosas pasadas desde el siglo; porque yo soy Dios, y no hay más Dios, y nada hay á mí semejante; Que anuncio lo por venir desde el principio, y desde antiguo lo que aun no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quisiere.

Después de 400 años con Dios guiándolos, el pueblo de Israel rogó por un rey.

Dios les dio a Saúl, luego a David, y la línea real siguió adelante. Pero los líderes son humanos. Los humanos son pecadores. Solo con Dios la ley es perfecta, las decisiones son justas, el tiempo es perfecto y los resultados, aunque inicialmente no siempre deseables, son los que Él considera mejores.

Las hermosas palabras del himno “Día a día” pintan un cuadro reconfortante del reinado de Dios sobre el universo. Dice: “Confiando en la amplia dádiva de mi Padre, no tengo motivos para preocuparme o temer. Aquel cuyo corazón es bondadoso más allá de toda medida, da a cada día lo que considera mejor.”

Lina Sandell Berg no escribió esas palabras a ciegas. A los veintiséis años, vio cómo su amado padre se ahogaba después de caer de un barco que se tambaleaba. Su trágica experiencia podría haberla apartado de Dios. En cambio, al igual que el salmista David, trabajó con Él a través de su dolor. Continuó escribiendo himnos, muchos de los cuales reflejan su corazón sanado. Ella mantuvo al Rey Divino sobre su vida.

Independientemente de las circunstancias, de qué dolor o alegría nos sobrevengan, podemos resolver que la ley de Dios es perfecta, sus decisiones son justas, su tiempo es perfecto. Él solo permite para nosotros lo que “Él considera mejor”.


Reflexión

¿Qué tragedia ha permitido Dios en mi vida? ¿He dejado que Él se involucre en sanarme? ¿Qué tan fácil es para mí confiar que Él “anuncia el fin desde el principio”?


Plegaria

Querido Dios, No hay otro Dios como tú. Solo tú gobiernas el universo. Solo tú gobiernas mi corazón. Gracias por tu gran, perfecto y perdurable amor. Puede que no entienda tus caminos, pero confío en ti. En el nombre de Jesús oro, Amén.