Cuando recuerdo la bondad de Jesús hacia mí, puedo ser amable con los demás, incluso con mis enemigos
Amad, pués, á vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo: porque él es benigno para con los ingratos y malos.
del tema de Bondad