Si has sufrido la muerte de una querida mascota, quizás hayas oído hablar del Puente Arcoíris.

Este lugar sobrenatural recibió ese nombre a través de varias obras de poesía a finales del siglo XX. Los amantes de las mascotas de todo el mundo han encontrado consuelo en la idea de que su querida mascota ha cruzado a un mundo hermoso donde algún día se reunirán con su dueño. Para aquellos que realmente amaban a un animal, el Puente Arcoíris ayudó a aliviar el dolor de la pérdida.

El cielo es nuestro Puente Arcoíris, ¡pero es real!

Jesús dijo antes de ascender que nos iba a preparar un lugar (Juan 14:1-3), un lugar donde este cuerpo corruptible será incorruptible, un lugar donde la vida continuará sin envejecer, sin debilitarse, sin descomponerse.

Jesús dijo: “Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá. Quien vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees tú esto?” (Juan 11:25-26). Si crees en Jesús, no temas a la muerte porque Jesús te mueve de muerte a vida (Juan 5:24).

La clave es asegurarte de tener una relación íntima con Jesús en todo lo que hagas, entonces un día Él te llamará a vivir con Él por la eternidad.