Jesús El Invitado

por Sam

Lucas 19:5

Y como vino á aquel lugar Jesús, mirando, le vió, y díjole: Zaqueo, date priesa, desciende, porque hoy es necesario que pose en tu casa.

¿Cómo te sentirías si el director ejecutivo de tu empresa llegara repentinamente a tu lugar de trabajo? ¿Intentarías limpiar rápidamente tu área de trabajo? ¿Te preguntarías si te van a despedir? ¿Preguntarías por un aumento?

Jesús hizo algo similar con Zaqueo en la historia que leemos en Lucas 19. Sabía de la reputación del jefe de los recaudadores de impuestos en Jericó. Zaqueo fue despreciado incluso por otros en su profesión. Sin embargo, Jesús vio más allá de la codicia de la carne humana pecaminosa a un alma que anhelaba una renovación.

Jesús vio la hermosa alma humana dentro de Zaqueo. Jesús fue a su casa para salvarlo a él y a su familia.

¿Alguna vez has sentido que tu carácter podría estar un poco sucio para Jesús?

Él te ama como eres, pero quiere ayudarte a ser mejor. Él quiere transformar la casa de tu corazón con su amor. Invítalo a entrar; ¡Permite que Jesús sea un invitado hoy!


Reflexión

¿Quiénes son algunas personas a las que hoy puedo ayudar del modo en que Jesús ayudó a Zaqueo? ¿Cuáles son algunas formas en las que puedo ayudarlos?


Plegaria

Querido Jesús, por favor entra y quédate hoy en mi corazón. Hazme mejor y renuévame con tu amor. En tu nombre oro, Amén.